En medio del incremento de amenazas, hostigamientos y atentados al movimiento sindical del país, en el Departamento de Caldas se han reflejado fehacientemente estos hechos

 

Desde el 2012 han estado llegando panfletos amenazantes contra miembros del Comité Ejecutivo de la CUT.

El 4 de agosto de 2012 el presidente y el secretario ejecutivo de la Central, sufrieron un grave atentado en la vía al Corregimiento de Arauca.

De igual manera han llegado escritos intimidatorios a miembros de la junta directiva del sindicato de la CHEC (SINTRAELECOL)

De las simples amenazas han pasado a los hechos, pues recientemente la casa del secretario general fue baleada y uno de los disparos le rozó el estómago a éste.

Como si la situación no fuera compleja, desde noviembre del 2012 les cancelaron los esquemas de seguridad a los compañeros de la Junta Directiva de EDUCAL y, también, miembros del Comité Ejecutivo de la CUT, Rubio Ariel Osorio González y Juan Carlos Martínez Gil, con el argumento que ya no existen altos niveles de riesgo para ellos, afirmación que resulta falsa ante los constantes hostigamientos sufridos durante el tiempo que han estado sin seguridad permanente.

Recientemente se atizó la situación por el anónimo enviado a Juan Carlos Martínez Gil a su correo electrónico, donde se deja entrever la molestia que ha generado el proceso judicial que éste adelanta contra miembros del ESMAD que atentaron contra su vida, en hechos ocurridos el 8 de junio de 2007, donde perdió su ojo izquierdo, lo cual, precisamente, generó el otorgamiento del esquema de seguridad.

La junta directiva de EDUCAL rechaza enfáticamente la persecución contra el movimiento sindical caldense, en particular a ñeros Rubio Ariel Osorio Gonzáles y Juan Carlos Martínez Gil.

Demanda del Estado Colombiano, representado en el Ministerio del Interior y en la Unidad Nacional de Protección, la atención inmediata a nuestra solicitud de retornarles los esquemas de seguridad completos a nuestros compañeros. De igual forma, solicitamos a las autoridades competentes avanzar en las investigaciones para dar con el paradero de los responsables de las amenazas constantes a dirigentes sindicales del departamento.