Desde el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos queremos denunciar la situación que se está viviendo actualmente de persecución contra los líderes reclamantes de tierras en la zona Caribe y en particular en el departamento de Sucre.

El17 de noviembre de 2016, a las 10 am, se produjo un atentado frustrado contra Argemiro Lara en la ciudad de Sincelejo. Argemiro es líder de restitución de tierras, presidente de la Asociación de Campesinos de la Finca la Europa, en el municipio de Ovejas, Sucre, y miembro del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos –CPDH- y del Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado – MOVICE. Además, a lo largo de este año, Argemiro ha recibido varias amenazas e intimidaciones, que se vienen repitiendo desde hace años; por esos hechos se han presentado las denuncias antes las autoridades competentes. Sin que hasta el momento se haya adelantado ni tenido avances en las respectivas investigaciones. Como consecuencia de ello, cuenta con medidas de protección de la UNP (escolta, chaleco antibalas, y teléfono celular), que resultan insuficientes. La Finca la Europa contaba con un esquema de protección colectivo que fue retirado en 2015 al considerarse que tenían “riesgo ordinario”. Andrés Narváez, otro líder del proceso de restitución de La Europa, sufrió un atentado en 2014; como consecuencia de ello, de las constantes amenazas y de la inoperancia de la justicia, que dejó en libertad al responsable del atentado, Andrés tuvo que salir del país. De igual forma, el día 10 de noviembre, fue asesinado el hijo de otro líder reclamante de tierras de la Finca la Alemania, también en Sucre.

Desde el CPDH exigimos al Estado, con sus diferentes instituciones, que tomen medidas de forma urgente para ofrecer garantías reales a los defensores de derechos humanos y a los reclamantes de tierras, que son amenazados y agredidos como consecuencia de la exigencia de derechos que realizan. Igualmente llamamos a las entidades de derechos humanos, nacionales e internacionales, a que hagan un seguimiento a la grave situación en Sucre y tomen las medidas necesarias para garantizar la vida y la integridad de los defensores de derechos humanos y reclamantes de tierras en el departamento. No se entiende el motivo por el cual no se ha implementado las medidas de protección necesarias ni se han tomado las acciones pertinentes para garantizar la seguridad de los líderes reclamantes de tierras que son constantemente revictimizados.

La firma del Acuerdo Final de La Habana y su implementación requieren que se refuercen las garantías para toda la población, pues sólo así se podrá avanzar en la construcción de una paz estable que garantice la vida y los derechos humanos. Hechos como los de esta mañana no pueden seguir sucediendo en el país.