Alerta: Se extiende la mancha de sangre y horror en el departamento de córdoba

Como en otrora, se volcán en los municipios, las calles, los corregimientos, las veredas, del departamento de córdoba el terror y pánico colectivo; aquellos días de los “tangueros”, ACCU y AUC parecen no tener fin; panfletos amenazantes repletos de desprecio y menosprecio  a la vida humana juran “limpieza social” y “haber llegado para quedarse” como sucedió en santa cruz de lorica y Tierralta (córdoba) en nombre de los “Urabeños” (pseudónimo criminal que usan “reingenierados” paramilitares para parangonar sus hechos sistemáticos de crimen organizado).

En municipios del bajo y alto sinú cordobés en menos de ocho (8) días han concurrido NUEVE (9) asesinatos bajo la misma modalidad criminal, a la vista gorda de las autoridades civiles y militares, a quienes les basta y calma su conciencia “dar condolencias por redes sociales” a los familiares de las víctimas y hacer promesas fatuas como “dar con los móviles del hecho”.

El problema de raíz, que debe ser abordado y confrontado es el PARAMILITARISMO que NUNCA HA DEJADO de existir en los pueblos del alto sinú, zona san jorge, en la ciudad capital y zona costanera; la razón: EL CONTROL DEL NARCOTRAFICO y la dominación NARCO-POLITICA.

Las “AGC” (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) o Clan Usuga DOMINAN EN CÓRDOBA, tienen bajo nomina a policías y miembros de la cúpula militar, “maniqueados” a los administradores de turno y desde luego, aterrorizada a la ciudadanía, bajo el termino de que “quien no está con ellos, está en su contra”.

Se hace necesario que un GRITO COLECTIVO de protesta y condena de estos brotes de SICARIATO organizado, que anteceden aparatos organizados con fines extorsivos, de control del tráfico y micro-tráfico de estupefacientes y las amenazas individuales y comunitarias SE TOME LAS CALLES DE LOS MUNICIPIOS  y CIUDAD CAPITAL para EXIGIR a los gobiernos de turno que garanticen nuestra libertad, seguridad, derecho a la vida y la paz.

¡No más acribillados!

¡Por nuestros muertos ni un minuto de silencio!

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