Mujeres y organizaciones sociales juzgarán ética y políticamente a los Estados y empresas trasnacionales responsables de la militarización de los territorios. Esta fue una de las conclusiones consignadas en el Llamamiento y Mandato del Encuentro Internacional de Mujeres y Pueblos de las Américas contra la Militarización que se realizó en Colombia entre el 16 y el 23 de agosto, con la participación de 3000 mujeres y hombres representantes de organizaciones sociales de nuestro país y 100 delegadas y delegados internacionales en representación de 18 países de Europa y América.
Durante el Encuentro se hizo evidente la grave crisis humanitaria que vive Colombia, en el contexto del conflicto armado y de la creciente militarización de América Latina, lo que llevó a la conclusión de la necesidad de juzgar, desde las mujeres y los pueblos, a los responsables de hechos como: el desplazamiento forzado, la violencia sexual, el despojo del territorio, el empobrecimiento, la desaparición forzada, la impunidad, el secuestro, la desarticulación de los procesos sociales en el marco del conflicto social y armado, y la utilización del cuerpo de las mujeres como botín de guerra.
El Encuentro también hizo un especial reconocimiento a los procesos de resistencia ante la militarización que se adelantan en Colombia, país anfitrión, y destacó el papel de las mujeres “protagonistas de estos procesos, quienes han sido y siguen siendo la fortaleza de sus pueblos a pesar de seguir recibiendo el impacto directo de la violencia, la pobreza, la exclusión y la discriminación, que en el caso de los conflictos sociales, políticos, económicos y armados significa explotación, miseria, violaciones sexuales, violación a su libertad sexual, y a otros derechos humanos básicos, implementando también el desarraigo, la persecución y la muerte.”
En este sentido, el Llamamiento y Mandato del Encuentro resolvi, entre otras conclusiones y agendas: “Impulsar, dinamizar y apoyar las cortes de mujeres y de pueblos desde lo local, regional nacional e internacional en la recuperación de la memoria por la verdad, la justicia y reparación y la no repetición”.
Transcribimos a continuación el mandato surgido del Encuentro
Llamamiento y mandato de las mujeres y los pueblos de las Américas
16 al 23 de agosto de 2010
La resistencia de las mujeres y
los pueblos posibilitará que la madre tierra y
la vida humana se preserven por siempre.
Colombia se vistió de rostros de mujer, rostros de niñas y niños, de rostros de hombres; los rostros de los pueblos, quienes llenas y llenos de esperanzas, sueños, experiencias, luchas y resistencias, participamos llegadas y llegados desde la Argentina, Paraguay, Brasil, Perú, Ecuador, Venezuela, el Salvador, Honduras, Haití, Guatemala, Cuba, México, Estados Unidos, Canadá, España, Francia, Italia, Bélgica, Alemania; como también desde los rincones de Colombia sus departamentos y regiones de Nariño, Cauca, Valle, Huila, Chocó, Antioquia, Tolima, Cundinamarca, Bogotá, Magdalena medio, Bolívar, Santander, Norte de Santander, Arauca, Atlántico; para participar decida y alegremente en el Encuentro Internacional de Mujeres y Pueblos de las Américas contra la Militarización desde 16 al 23 de agosto.
Este encuentro ve hoy más que nunca cómo la amenaza de guerra mundial resuena y se impone ya en distintas geografías y la humanidad está en la encrucijada de su sobrevivencia y la de otras formas de vida aún existentes. Este encuentro se realiza en un momento en el que el imperialismo norteamericano está diseñando y ejecutando estrategias agresivas de recolonización para reposicionarse y tratar de recuperar la gran crisis de su sistema capitalista. El despojo de las riquezas de los pueblos y la violación a los derechos humanos de mano de la militarización son el camino que han definido, utilizando para ello los medios de comunicación masiva como el amarre ideológico y cultural.
Colombia es un extenso territorio con riquezas minerales, petróleo, fuentes de energía, agua, biodiversidad, flora, fauna, saber tradicional y ancestral de los pueblos indígenas, negros y campesinos; hoy muy codiciados y explotados por las empresas transnacionales que solo se interesan en sus vergonzosas e inhumanas ganancias, para lo cual alientan y fortalecen estos procesos de militarización, guerra, desarraigo, despojo y muerte dañinos a los pueblos y sus territorios; esta lógica dominante extendida y aplicada en toda nuestra América.
El país está conformado por una gran diversidad de pueblos indígenas, afrodescendientes, mestizos, comunidades campesinas y poblaciones urbanas cansadas de la guerra y la violencia que afecta al país desde hace más de 50 años y que ha causado cuatro millones y medio de desplazadas y desplazados y miles de personas asesinadas, desaparecidas y encarceladas. Estas comunidades y pueblos resisten de manera valiente y creativa, a través de procesos de soberanía de cuerpos, territorios y alimentos; afirmándose en sus propias y diversas identidades organizativas, culturales, espirituales y de cosmovisión; proponiendo como eje la unidad y la búsqueda e implementación de la vida digna, la autonomía, autodeterminación y soberanía.
Las mujeres, protagonistas de estos procesos, han sido y siguen siendo la fortaleza de sus pueblos a pesar de seguir recibiendo el impacto directo de la violencia, la pobreza, la exclusión y la discriminación, que en el caso de los conflictos sociales, políticos, económicos y armados significa explotación, miseria, violaciones sexuales, violación a su libertad sexual, y a otros derechos humanos básicos, implementando también el desarraigo, la persecución y la muerte.
El encuentro posibilitó que se organizaran misiones humanitarias de solidaridad hacia distintas regiones del país, que han permitido el intercambio de experiencias, vivencias y reflexiones entre las personas participantes, las mujeres, los pueblos, las comunidades rurales y urbanas colombianas. En estas visitas se pudo no sólo entender la realidad concreta sino darle rostro y nombres a quienes han enfrentado el proyecto de la militarización y la resistencia en sus territorios y vidas cotidianas, también los intereses económicos y geoestratégicos que se defienden. Esta oportunidad permite a la comunidad internacional continuar denunciando la terrible violación a los derechos humanos, que en Colombia adquiere niveles de perversión en prácticas como los falsos positivos, que son vinculaciones de personas inocentes con elementos que justifiquen el asesinato, y encarcelamiento, la desaparición forzada, y desplazamiento con lo que se demuestra que en este país no se está viviendo el postconflicto, como hoy lo asegura el gobierno.
Durante dos días se intercambiaron las experiencias de resistencia de las mujeres y de los pueblos de Colombia y el continente; se denunció el impacto de la militarización; se reafirmó la convicción de que estamos cansadas y cansados de la opresión, la explotación y la cultura de la muerte del capitalismo patriarcal y racista.
Desde este encuentro, en el ánimo colectivo de justicia, respeto y solidaridad continental hablamos al mundo para reiterar nuestro compromiso como mujeres y pueblos contra la militarización, y nos posicionamos para:
Luchar por justicia hacia las mujeres y que se pare la violencia, la intimidación, el control y la utilización de las mujeres como botín de guerra.
Rechazar con energía la estrategia imperialista de los Estados Unidos para militarizar las vidas, territorios y deseos que busca controlar las riquezas de los países y las consciencias. Decimos Fuera Bases militares yanquis de América Latina y del Caribe.
Rechazar la presencia de bases norteamericanas en nuestros países y territorios exigiendo su retiro inmediato.
Luchar contra la injerencia de ejércitos de ocupación como la MINUSTAH en Haití.
Luchar por el cierre de las bases militares en toda nuestra Abya Yala, contra los megaproyectos de energía, explotación petrolera, minera, la privatización del agua, y el despojo de territorios que favorecen hoy a las grandes empresas transnacionales.
Rechazar la amenaza inminente intervención militar en Costa Rica con más de 7000 efectivos militares y 46 buques de guerra de los Estados Unidos.
Rechazamos los intentos de desestabilizar el gobierno legítimo y las provocaciones reiteradas contra el pueblo de la republica Bolivariana de Venezuela.
Reiterar nuestra solidaridad con la resistencia nacional de Honduras, aglutinada en el FNRP, quienes enfilan su política y acción hacia el proyecto de refundación nacional, y en lo inmediato a una convocatoria de Asamblea Nacional Constituyente Popular y Democrática por ello llamamos también a los gobiernos estados y pueblos del mundo a no reconocer el régimen de Porfirio Lobo, quien es el continuador del golpe de estado y de las políticas de violación a los derechos humanos contra el pueblo hondureño que se mantiene en lucha.
Repudiar la criminalización de la lucha de los pueblos que significa muerte y represión contra mujeres y hombres y sus procesos organizativos.
Rechazar la política antiinmigrante que hoy se impone en los estados unidos fortaleciendo la lucha contra el muro.
Rechazar el nombramiento de Alvaro Uribe Vélez para la comisión de investigación por el crimen cometido con las brigadas de solidaridad con el pueblo palestino por el gobierno israelí.
Continuar en la lucha por la liberación de los cinco hermanos cubanos hoy presos injustamente en cárceles de los Estados Unidos.
Respaldar a la acción en la republica del Congo de la Marcha Mundial de Mujeres para el 17de octubre.
Acogemos el 10 de diciembre como el día de lucha continental contra las bases militares extranjeras.
Acogemos lo mandatado por la asamblea de los movimientos sociales en el IV Foro Social de las Américas realizado en Paraguay. Igualmente lo mandatado en el I y II encuentros hemisféricos contra la militarización Chiapas y Honduras.
Nos comprometemos a dinamizar e impulsar el IV Encuentro continental hemisférico contra la militarización.
Nos vinculamos a la campaña contra la militarización que se articula continentalmente.
Para el caso colombiano llamamos y proponemos al continente ya al mundo:
Mantener firme la propuesta de solución política y negociada al conflicto social y armado interno que tiene Colombia.
Fortalecer y reconstruir los movimientos sociales como sujetos políticos fundamentales para la paz
Impulsar dinamizar y apoyar la corte mujeres y de pueblos desde lo local, regional nacional e internacional en la recuperación de la memoria por la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición.
Incentivar la unidad, el fortalecimiento de la concientización, la organización, la comunicación alternativa y la movilización como elementos importantes de autonomía lucha y resistencia.
Participar y acompañar la realización del congreso de los pueblos convocado desde la minga nacional de resistencia social y comunitaria para los días 8 a12 de octubre del 2010.
Hoy reafirmamos nuestro compromiso por la vida digna, la defensa de nuestros territorios, la soberanía, autonomía, autodeterminación, cultura y ancestralidad como movimientos sociales entendiendo que la lucha contra la militarización y las bases militares es un pilar fundamental para la paz.
Mi cuerpo es mi casa
Mi casa es mi territorio
Mi territorio es mi patria
Mi patria es mi continente.
Convocantes:
• La Marcha Mundial de las Mujeres
• Vía Campesina
• Convergencia de los Movimientos y pueblos de las Américas -COMPA,
• Minga Social y Comunitaria
• Consejo Mundial de la Paz – CMP
• Coordinador Nacional Agrario-CNA
• Proceso de Comunidades Negras-PCN
• Corporación Compromiso
• Unión Sindical Obrera- USO
• Corporación Colombiana de Teatro
• Movimiento Social de Mujeres contra la Guerra y por la Paz: Consejo Regional Indígena del Cauca, CRIC; Organización Femenina Popular, OFP; Mujeres de Negro – OFP Colombia; Colectivo Policarpa Salavarrieta, La Pola; Cundinamarca; Proceso Nacional de Mujeres Campesinas – CIC-ANUCUR: (Federación de Mujeres Campesinas de Nariño, Asociación de Mujeres Campesinas de Pradera, Comité de Mujeres Campesinas de Caldas, Coordinación de Mujeres Campesinas de Atlántico, Coordinación de Mujeres Campesinas de Sucre); Equipos Cristianos de Acción por la Paz, ECAP; Resguardo Indígena Cariamomo, Caldas, Risaralda; Programa Mujer Indígena, CRIC; Pueblo Yanacona; Pueblo Totoroes; Pueblo Coconuco; Pueblo Nasa; Red de Mujeres de Tiquisio; Pueblo Siapirara; Pueblo Eperara; Resguardo Indígena Triunfo Cristal Páez; Asociación de Proyectos Alternativos Comunitarios, APAC; Asociación de Madres Comunitarias del Área Metropolitana de Bucaramanga; Asociación de Mujeres Productoras de Cárnicos, ASOMUPCAR; Comisión Interfranciscana de Justicia, Paz y Reverencia con la Creación; Hermanas Nuevas Esperanzas, Alianza Fraternal de Mujeres; Asociación de Mujeres Fe y Vida, AMUFEVI; Ciudadanos por la Paz; Hermanas de San Juan Evangelista, Pastoral Obrera Bogotá, Bucaramanga, Barrancabermeja; Movimiento Juvenil Quinto Mandamiento; Fundación de Apoyo y Consolidación Social para Desplazados por la Violencia en Colombia, FUNDESVIC; Colectivo Gioconda Belli y Colectivo El Aquelarre de Estudiantes de la Universidad Surcolombiana; Constituyente de Betulia, Santander; Red de Mujeres del Nororiente Colombiano de la Provincia García Rovira; Asociación de Madres Comunitarias de la Provincia García Rovira; Asociación de Madres Comunitarias de la Provincia Puerto Wilches; Asociación de Mujeres Rurales por la Paz y el Progreso, San Gil; Emisoras Comunitarias Magdalena Medio; Pax Christi-Alemania; Asociación Municipal de Mujeres Campesinas de Lebrija, AMMUCALE; Asociación Santandereana de Servidores Públicos, ASTDEMP; Movimiento por la Defensa de los Derechos del Pueblo, MODEP; Siervas de San José, Bogotá; Liga Estudiantil Autónoma, LEA; Unidad Social Popular, Girón; Colombia Support Network Madison,WI
APOYAN:
Mujeres de Negro de Valencia, España/Mujeres de Negro de Sevilla, España/ Mujeres de Negro de Italia/ Coalición No Bases Colombia/ONGD Atelier, España/Kairos, Canadá/ Diakonía Suecia/Civis Suecia/Heks Suiza/Colectivo Maloka, España/Taula Catalana per la Pau i els DDHH a Colòmbia – España/Fondo para la No Violencia, Estados Unidos/Mujeres Católicas de Austria/EntrePueblos/Coordinación Colombia Europa Estados Unidos/Coordinación Colombia Europa Estados Unidos, Nodo Centro/ILSA/Comité Permanente para la Defensa de los Derechos Humanos/ANDAS/Sisma Mujer/Red Europea de Hermandad y Solidaridad con Colombia, REDHER/Asociación para la Promoción Social Alternativa, MINGA/Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo/Comité de Solidaridad con los Presos Políticos/Corporación Sembrar/ Federación Agrominera del Sur de Bolívar, FEDEAGROMISBOL/Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Alimentaria, SINALTRAINAL/Asamblea de Mujeres por la Paz y la Equidad de Géneros de la Asamblea Permanente de la Sociedad Civil por la Paz/Espacio de Trabajadores y Trabajadoras de Derechos Humanos de Barrancabermeja-Magdalena Medio/Foro Social del Magdalena Medio/Fundación Manuel Cepeda Vargas/Cátedra Libre Ignacio Martin Baró/Mesa Valenciana por los Derechos Humanos de las Mujeres en Colombia/Corporación Valenciana por los Derechos Humanos en Colombia.
Colombia, 23 de agosto de 2010