Viene siendo víctima de violación a sus derechos humanos por cuenta de la negligencia y obstrucción en los trámites médicos por parte de funcionarios públicos penitenciarios.
El día 24 de octubre a las 8:30 am durante un operativo de registro y control de la guardia penitenciaria en el patio 14, que por abuso de autoridad de estos, termina en una agresión contra todos los internos que terminan golpeados con los bastones de mando y sometidos con gases lacrimógenos; el señor Traslavina Díaz es impactado por una de las granadas lacrimógenas, que de rebote le golpea en la cara a la altura del ojo izquierdo, causándole disminución de la visión, fuerte dolor y enrojecimiento con lagrimeo constante.
El día 25 el médico general autoriza la remisión al especialista. La enfermera Gloria hace las gestiones para la remisión, según ella en horas de la tarde. El teniente Mora pide a sanidad organizar la remisión.
El día 26 el señor Traslavina está listo para la remisión porque Yolanda, otra funcionaria de sanidad del INPEC le informa y le orienta que esté preparado.
Ese mismo día en las horas de la tarde, el interno Juan Barrera, coordinador de los promotores de salud en el Eron, le informa a las 4:00 pm que la remisión no se realizara porque la encargada del Área de Sanidad INPEC, doctora Luz Dary Estupiñán, la freno diciendo que no se necesitaba remisión por urgencia pues según su criterio eso se podía atender en una cita médica normal dentro del establecimiento. Así mismo se negó a que le fuera entregado el medicamento formulado por el medico (diclofenaco oftálmico en gotas) que hasta el momento siguen sin suministrarle.
Esta actitud y procedimiento de la Dra Luz Dary Estupiñán pone en grave riesgo la salud visual y ocular del prisionero político en mención, violando su derecho fundamental a la salud y a un adecuado tratamiento.
Solicitamos emprender las acciones urgentes del caso que garanticen la atención médica oportuna y suficiente del señor Traslavina Diaz.
Así mismo solicitamos que se inicien las acciones disciplinarias y penales a que haya lugar contra la susodicha doctora por sus procedimientos negligentes, arbitrarias y de franco riesgo para con la salud del interno.
