Estas quejas se enmarcan en una estrategia integral de defensa de los derechos humanos a la salud y al ambiente sano emprendida por las organizaciones que por años hemos venido acompañando los procesos de defensa territorial y de denuncias lideradas por comunidades Wayúu y afrodescendientes impactadas por décadas de operación carbonífera en su territorio
Martes 19 de enero de 2021. La organización irlandesa Global Legal Action Network (GLAN), apoyada por la agencia internacional de desarrollo Christian Aid, la organización regional AIDA y las organizaciones nacionales de Derechos Humanos CINEP/PPP y CAJAR, radicamos de manera simultánea tres quejas ante los Puntos Nacionales de Contacto de la OCDE* en Irlanda, El Reino Unido, Suiza y Australia en las que se denuncian los múltiples impactos de la mina operada por la empresa Carbones del Cerrejón en detrimento de la vida y los Derechos humanos de las poblaciones indígenas, afrodescendientes y campesinas de La Guajira, así como la falta de debida diligencia y el incumplimiento de los lineamientos de la OCDE.
La primera queja la presentamos en contra de la ESB (Electricity Supply Board), una empresa estatal irlandesa que compra carbón de Cerrejón. La segunda queja, en contra del CMC (el Coal Marketing Company) de Cerrejón, que tiene su sede en Dublín. Paralelamente, presentamos una tercera queja en contra de las sociedades multinacionales mineras dueñas del Cerrejón BHP, Angloamerican y Glencore.
Estas quejas se enmarcan en una estrategia integral de defensa de los derechos humanos a la salud y al ambiente sano emprendida por las organizaciones que por años hemos venido acompañando los procesos de defensa territorial y de denuncias lideradas por comunidades Wayúu y afrodescendientes impactadas por décadas de operación carbonífera en su territorio. La exigencia de la responsabilidad empresarial es apremiante ante los recientes anuncios de las sociedades matrices de poner en venta sus acciones sin que se tengan claridad de sus históricas deudas, compromisos y obligaciones en materia de derechos humanos en el país.
Jenny Paola Ortiz del CINEP considera que: “En La Guajira las comunidades Wayúu y Afrodescendientes se están disputando el derecho a la vida frente al etnocidio y ecocidio que están viviendo resultado de la actividad minera. En diversas investigaciones y fallos judiciales se ha demostrado la sistemática violación de derechos: más de 25 comunidades han sido desplazadas, confinadas y despojadas de sus territorios ancestrales, se han contaminado y desviado más de 17 arroyos tributarios del Ranchería – único río del departamento-, y existen abusos de poder y asimetrías entre la empresa y las comunidades”.
La operación minera desarrollada por la empresa Carbones del Cerrejón en La Guajira se ha dado de manera continua en detrimento de los derechos de las comunidades étnicas, desconociendo los estándares internacionales ambientales aplicables a este tipo de operaciones y en sistemático incumplimiento de las sentencias judiciales que han reconocido la responsabilidad de la empresa y el Estado ante los alegatos de violaciones a derechos hechas por las comunidades.
Para Rosa María Mateus del CAJAR: “Si no se logró cuestionar los impactos de la imposición de esta mina, es necesario que se haga una evaluación tanto de la conducta empresarial como de los pasivos ambientales y sociales que han dejado estas empresas antes de su salida del país para evitar que se consoliden escenarios de impunidad corporativa”.
Dichas operaciones, también han profundizado la vulnerabilidad del territorio ante la actual crisis climática dada su contribución al mercado y quema de carbón, uno de los minerales con mayor incidencia en el calentamiento global.
Por su parte Liliana Ávila, abogada senior de AIDA señaló que “este tipo de reclamaciones evidencian la importancia de considerar los impactos climáticos que conlleva la minería de carbón en Colombia, tanto a nivel territorial como en su contribución a las emisiones globales.”
Con estas quejas buscamos que las empresas domiciliadas en Irlanda, suspendan sus relaciones comerciales con la empresa Carbones del Cerrejón dada su responsabilidad en violaciones a Derechos Humanos; que las casas matrices de Cerrejón reconozcan su corresponsabilidad en el marco de los hechos denunciados y que todas las empresas involucradas, según su grado de responsabilidad, emprendan acciones de remedio y de restauración ambiental, en el marco de la debida diligencia y de la obligación de respeto de los Derechos Humanos. Adicionalmente, estas quejas buscan visibilizar la situación de las comunidades afectadas por las operaciones de la empresa el Cerrejón, y sobre todo, generar las condiciones necesarias para que cese la violación de los derechos de las comunidades en La Guajira y así promover el avance hacia una transición justa, participativa y progresiva en el territorio.
Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente – AIDA
Centro de Investigación y Educación Popular/ Programa por la Paz – CINEP/PPP
Colectivo de abogados José Alvear Restrepo – CAJAR
*La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es una organización internacional que cuenta con Líneas Directrices para Empresas Multinacionales, las cuales son recomendaciones voluntarias dirigidas por los gobiernos a las empresas multinacionales para una conducta empresarial responsable dentro del contexto global. Esta organización cuenta con Puntos Nacionales de Contacto, que son organismos constituidos por los gobiernos de los países adherentes con el fin de promover e implementar las Directrices.