Del 29 de septiembre al 1 de octubre, se llevará a cabo la Misión de Observación sobre salud y ambiente en la Media Guajira, con el objetivo de evidenciar las graves afectaciones a la vida, la salud, la sanidad básica y el ambiente sano de comunidades indígenas y afrodescendientes, producto de la explotación de carbón a cielo abierto de Cerrejón S.A
Esta misión integrada por organizaciones sociales, defensoras y defensores de derechos humanos y periodistas, visitará el Resguardo Provincial y otras zonas aledañas a la extracción minera, y se entrevistará con autoridades del municipio de Barrancas en el sur de La Guajira.
En los últimos años, ha despertado gran preocupación la muerte de niños wayuú menores de cinco años en esta zona del país, situación que ameritó el pronunciamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos al otorgar medidas cautelares para la protección frente al riesgo de muerte de niños y niñas, madres gestantes y últimamente de adultos mayores.
Por otra parte, son necesarios estudios independientes sobre la relación de la actividad minera con la salud y el ambiente de las comunidades afectadas, máxime después de la socialización de investigaciones que adelantan miembros de la Universidad del Sinú en el municipio de Mayepo, según las cuales:
“En el aire de las comunidades encontramos elementos altamente enriquecidos como el azufre (S) y otros medianamente enriquecidos como el Cromo (CR), Cobre (Cu) y el Zinc (Zn)” y “Comparado con MAYAPO3 los habitantes del corredor minero mostraron altas concentraciones de Cromo(Cr), Níquel (Ni), Manganeso (Mn), y Bromo (Br) en la sangre… Elementos como el Azufre (S), Cromo (Cr y Bromo (Br) pueden dañar las células del cuerpo”. La misma investigación indica que existen “daños en las células de los pobladores del corredor minero. Este daño puede relacionarse con algunas enfermedades respiratorias, del corazón, de la piel, estómago y cáncer.
El Resguardo Provincial, ubicado en el municipio de Barrancas, en la Media Guajira, ha sido seriamente afectado por el impacto en la salud de la extracción minera. Hoy se encuentra cercado por tres tajos o sectores de explotación, en donde a diario hay explosiones de dinamita para remover el suelo que luego es recogido por palas y vehículos enormes para llevarlo a silos que pueden contener hasta 13 mil toneladas de carbón; de allí el tren, que no se detiene nunca, se alimenta en sus recorridos diarios con destino al puerto de embarque.
La comunidad denuncia que hace ya mucho tiempo no tienen agua potable; que no hay transporte para que los niños vayan a estudiar; que el trabajo se redujo a esperar un empleo de la empresa que nunca llega; que la salud de la comunidad está en franco deterioro y que su territorio cada vez más contaminado ha dejado de ofrecerles alimentos.
Engañado, este resguardo hace dos años llegó a lo que hoy se conoce como “el mal acuerdo” con la empresa. La colectividad buscaba la reparación de más de treinta años de daños por la explotación minera, pero el abuso de poder corporativo logro manipular a un puñado de líderes para que aceptara transar los derechos y reclamaciones por el 0.6% de lo que eran las exigencias. Aun así, según dice la comunidad, la empresa tampoco ha cumplido “el mal acuerdo”.
Por todas estas razones, el Resguardo Provincial está en paro desde hace casi dos meses. La protesta consiste en atravesar una cabuya (lazo de fibra natural) en la única vía vehicular del resguardo; con ello impiden el paso de personal de Cerrejón cuando éste simula ir a controlar la contaminación en monitores que “no monitorean nada”, como señalan los habitantes de Provincial.
Mediante la documentación técnica-jurídica del caso, estudios de morbilidad y mortalidad, acceso a los sistemas médicos locales, material audiovisual, y principalmente el relato directo de los integrantes de las comunidades, la elaborará en un informe final que será presentado a las autoridades y a la opinión pública.