- Declaraciones como las del exsargento Dorado deben generar acciones inmediatas de las autoridades para proteger el derecho de los familiares de víctimas de desaparición forzada a saber la verdad y a encontrar a sus seres queridos.
- Candelaria Vergara, compañera de Pedro Julio Movilla, y su hijo José Movilla Vergara, hicieron un llamado al país a rodear esta exigencia para impedir que su ser querido sea nuevamente desaparecido y para por fin poder darle un último adiós, tras décadas de búsqueda incesante.
Bogotá D.C., 24 de junio de 2023. Ante noticia difundida por la W Radio sobre declaración ante la JEP del sargento José Leonairo Dorado Córdoba, el Colectivo de Abogados y Abogadas José Alvear Restrepo (Cajar), como representante de víctimas de varios de los casos mencionados por él, exige a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que establezca de manera inmediata medidas cautelares sobre las instalaciones en donde hoy queda la sede de la Escuela de Logística y Batallón de Contrainteligencia del Ejército Nacional, ubicado en el barrio de San Cristóbal de la ciudad de Bogotá, con el fin de impedir que se obstruya el derecho de las víctimas a encontrar a sus seres queridos desaparecidos de manera forzada.
“Consideramos urgente que la JEP ordene la protección sobre las instalaciones del batallón de logística que queda en San Cristóbal, para que no sean desaparecidos los restos de Pedro Julio nuevamente y los de otras personas víctimas de desaparición forzada que podrían estar inhumadas alli,” señaló Yessika Hoyos, presidenta del Cajar.
Por su parte, Candelaria Vergara, compañera de Pedro Julio Movilla, y su hijo José Movilla Vergara, llamaron al país a rodear esta exigencia para, tras décadas de búsqueda constante, darle un último adiós a su ser querido.
“Por favor, estamos suplicando a la JEP que dicte esta medida, porque ahí están los restos de mi compañero, que llevo 31 años y muchos meses buscando y llorando. Mis hijos y yo hemos sufrido mucho. Pedimos a esta sociedad, a todas las entidades, y a las organizaciones que pidan que ese sitio sea protegido para que el cuerpo de Pedro no lo vuelvan a desaparecer. Queremos que nos lo entreguen dignamente y darle un último adiós,” dijo Candelaria.
José Movilla manifestó: “Es una súplica humanitaria; necesitamos descansar de este dolor que ha estado comiéndose nuestras almas durante 31 años, descansar ya de este martirio, y hoy estamos muy cerca de lograr encontrar sus restos, por eso pedimos proteger ese lugar para recuperar a mi padre”.
De otro lado y ante las graves declaraciones del exfuncionario que evidencian el uso ilegal de las actividades de inteligencia, desde el Cajar consideramos que ya es hora de que se desclasifiquen los archivos de la Brigada XX y que sea posible acceder a la información de quiénes fueron víctimas de seguimientos y anotaciones, que condujeron a la comisión de ejecuciones, desapariciones y otras graves acciones criminales por parte de agentes del Estado.
Resaltamos que el relato de Dorado, sobre la desaparición forzada de Pedro Movilla Galarcio, coincide con lo que se ha podido establecer en investigaciones: el líder político venía siendo víctima de seguimientos ilegales antes de ser secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido por integrantes de la Brigada XX en 1993. Hasta el día de hoy su esposa, hijos e hija siguen buscándolo.
Las declaraciones del exsargento una vez más ratifican que en Colombia hubo una política de persecución y exterminio contra la Unión Patriótica, partidos y personas con pensamiento de izquierda, líderes sociales y personas defensoras de derechos humanos, fundamentada en la doctrina del enemigo interno. Las organizaciones de derechos humanos lo hemos denunciado históricamente y hoy insistimos en que aún son necesarios cambios estructurales #ParaQueNoSeRepita .
Esperamos que otros agentes aporten a la verdad para que esto conduzca a encontrar a las víctimas de desaparición forzada y se avance en el juzgamiento de los máximos responsables, aquellos que dieron la orden para que estos crímenes de Estado ocurrieran.
Antecedentes: