Explotación minera convertirá al Castillo – Meta, en un nuevo hueco del territorio colombiano, y dejará de ser despensa agrícola

Uno de los objetivos del Encuentro de Memoria Geográfica que inició el día 4 de octubre en el Castillo Meta, fue recopilar la información suficiente para entablar la denuncia respectiva respecto a la preocupante realidad de lo que está aconteciendo en la parte alta del municipio del Castillo (Meta).

El Encuentro contó con la participación de la Asociación de Trabajadores Campesinos del Alto Ariari –ATCARI- La comunidad de vida y paz –CIVIPAZ-, Justicia y Paz, directivos de las diferentes juntas de acción comunal, Memoria Histórica, jóvenes del comité juvenil AJFPE, cuatro biólogos de la Universidad Distrital de Bogotá y la comunidad en general.

El evento tuvo su apertura con una concurrida reunión en la cual se socializó ante las comunidades, diversos tópicos sobre el tema de la protección de los recursos naturales y la enorme riqueza en biodiversidad que existe en la región. También se expresó la preocupación por los graves impactos que dejan las diferentes actividades de la Locomotora Minera, tanto en lo ambiental como en lo social y económico.

Actualmente se encuentran amenazadas las fuentes hídricas de la región por la implementación de la Locomotora Minero – Energética y por el avance de la frontera agrícola. 14 títulos mineros ya se encuentran en concesión, al igual que otros 17 títulos que se ya están en proceso. De acuerdo al testimonio de uno de los voceros de las Juntas de Acción Comunal, lo anterior: “Demuestra el interés del gobierno colombiano, por imponer sus políticas de Estado y sus ansias por las riquezas de la región, para entregárselas a las grandes multinacionales sin importar las consecuencias para la vida de los campesinos y el daño innegable al medio ambiente”

Se denunció además el desconocimiento de los derechos humanos de los campesinos en todos los aspectos por parte de las autoridades y las instituciones del Estado, así como el aumento del conflicto armado en razón a la militarización de las áreas de explotación minera sin ningún control o seguimiento por los entes competentes.

Según lo expresaron los líderes de la actividad, este importante Encuentro, da inicio a una nueva fase en la lucha de las ya históricas que han asumido los campesinos de esta región. Sobre todo si se tiene en cuenta el precedente de desplazamiento forzado y masivo al que se vieron obligados cientos de habitantes del Alto Ariari durante los años de mandato del expresidente Álvaro Uribe Vélez.

Durante la segunda jornada del Encuentro en defensa del medio ambiente y la vida, los campesinos se dirigieron hacia diferentes sitios de la parte alta del municipio del Castillo, en compañía de los delegados de Justicia y Paz los jóvenes del AJFPE y los biólogos de la Universidad Distrital.

Se realizó la recopilación de información donde se evidenció lo justo de la preocupación que han expresado los campesinos, en relación a la disminución de especies nativas que allí habitan tanto de flora como de fauna. Estas se encuentran en alto riesgo en razón a las continuas exploraciones petroleras y actividades que se realizan en la mina de caliza que ya se está explotando en el marco de la implementación de los megaproyectos. La mina en mención se encuentra a escasos metros de Caño Seco, al igual que en cercanías de la Bocatoma del acueducto conocida como Peñas Blancas de Puerto Esperanza, de la cual se benefician más de 100 familias del sector de Medellín del Ariari y algunas otras veredas.

En conclusión las apreciaciones de la comunidad coincidieron con las de los expertos en el sentido que si se continúa con las exploraciones y se concretan las demás explotaciones mineras, el municipio pasaría de ser una de las primeras despensas agrícolas del departamento del Meta a convertirse en un hueco más en el territorio nacional a causa de la locomotora minera.

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