Las inquietudes de HRW América están contenidas en la carta que su director Ejecutivo, José Miguel Vivanco, le envió a la Fiscal General de la Nación, Viviane Morales, cuyo texto completo se anexa.
En su carta Vivanco afirma que se requieren medidas adicionales para asegurar que los esfuerzos de la Fiscalía tengan éxito y se supere el periodo de violencia impune contra sindicalistas en Colombia, país que no ha logrado hacer justicia en más de 2.500 asesinatos de sindicalistas cometidos en los últimos 25 años. Reconoce sí que el número de homicidios es inferior a las cifras de hace una década, pero sigue siendo superior al de cualquier otro país del mundo.
Apoyado en las bases de datos de la Escuela Nacional Sindical, Vivanco recuerda que en el 2010 en Colombia se cometieron 51 asesinatos de sindicalistas, hubo 22 tentativas de homicidio y 397 amenazas. Si bien admite positivos avances de la subunidad de fiscales creada en 2007 para investigar delitos contras sindicalistas, éstos han sido muy limitados, tanto en sus alcances como en la metodología empleada. “A menos que se adopten medidas urgentes para mejorar el desempeño de la subunidad, es casi inevitable que resulte insostenible… Lo que está en juego es la capacidad del sistema de justicia de disuadir de manera efectiva la violencia contra sindicalistas”, aseveró.
El director de HRW América recalca que el 60% de las 185 condenas proferidas desde 2007 por asesinatos de sindicalistas, han sido producto de sentencias anticipadas convenidas con paramilitares desmovilizados postulados al proceso de Justicia y Paz. Como también son muy pocas las condenas en casos cometidos en los últimos años, o sea no incluidos en Justicia y Paz.
Al final de su carta Vivanco formula algunas recomendaciones, que de ser acatadas por la Fiscalía “se podrán conseguir avances significativos en el juzgamiento de estos caso, y transformar a la subunidad en un mecanismo que disuada de manera efectiva futuros ataques contra sindicalistas en Colombia”.
